lunes, 23 de marzo de 2009

Postdata a "Jijas..."

Me dijo el jardinero que no leer a Borges era un defecto mío: ¡si sólo fuera eso!
Queda demostrado que un cafrulúkiyutentote en estado de reposo es un montón de adjetivos terminados en -able (piensen en los buenos, por favor).

Jijas de mi Pueblo


El diálogo se difuminaba entre besos y abrazos tan cálidos como el Levante que ha traído la primavera.
Si los automóviles fuesen diseñados por mujeres, quizás no alcazarían altas velocidades, pero casi seguro que tendrían colocadas las palancas del freno de mano y de cambio en otro lugar; incluso puede que aparcasen solos...y que todas las calles y carreteras fueran rectas y llanas.
Almorzar; me gusta este verbo para nombrar la comida del medio día, aunque la tendencia actual es relacionar los almuerzos con actos oficiales o con reuniones de empresa. Pero aquí, en esta bendita tierra del sur del Sur, siempre se ha almorzado (más o menos) sin tener que asistir a ningún tipo de reunión oficial o acto de encuentro socioeconómico. Y casi siempre se almuerza muy tarde: eso de hacerlo temprano es de guiri ¡pero si hasta los escolares almuerzan después de las 3! Y los domingos, no te digo...
Quizás fuese debido a la hora por lo que salieron a colación las brecas.
No, no almorcé jijas de SU pueblo, sino pimientos asados con langostinos y un revuelto de habas con jamón. Tampoco almorcé brecas, aunque sí hallé en el lugar donde cocinan ese plato de SU pueblo al antaño afamado jardinero, al parcer y debido a la crisis que atravesamos,prácticamente en el paro crónico: desde hace unos meses es evidente la falta de cuidados en el jardín, donde la maleza ha ido enmarañándose y los yerbajos han crecido sin control, axfisiando a la otrora hermosa flora. Espero que, con la llegada del buen tiempo, este hábil profesional de la poda reinicie sus tareas, como parece que está empezando a hacer.
El diálogo, como no cabría menos esperar, fue distendido y variopinto, aunque hubo un par de temas en los que se hizo más hincapié: los orantes compulsivos y las excreciones calcáreas.
En cuanto a los primeros, el jardinero me ayudó a descifrar un enigmático criptograma acerca de la cocina de religiones, asunto que estos días ha sido comidilla por los alrededores y del que Paco el Gordo debe haber oído hablar de cerca, aunque este no vive en la calle San Gregorio; ni siquiera en Palos de la Frontera, San Fernando o Doña Mª de Padilla; ni en la Puerta de Jerez: el Gordo está por lo menos a 100 kilómetros de esos lugares. Al final resulta que los mariquitas lo son desde siempre...algo que ya sabíamos, pero que no está mal recordar de vez en cuando.
Las excreciones calcáreas son harina de otro costal. Progresan adecuadamente y se desarrollan por superposición de capas, una vez hacen su aparición los primeros brotes, generalmente a partir de las protuberancias existentes a ambos lados del hueso frontal. A pesar de lo diferente de ambos temas, llegamos a una conclusión similar: los cornúpetas lo son desde siempre.
... ... ... ... ...

-Hola, ¿has llegado bien?
- sí; y tú ¿comiste algo?
- ¿recuerdas que estuvimos hablando de brecas?
- sí, claro...
-pues si te digo a quien me encontré en el mesón, justo unos minutos después, no te lo vas a creer...